TMNT: Tortugas Ninja Jóvenes Mutantes (Xbox 360, 2007)

Versión analizada: Xbox 360

Otras versiones: PC, PS2, Wii, GameCube, Game Boy Advance, Nintendo DS, PSP.

Dadas las notas de los juegos que hemos venido reseñando, podría parecer que en este blog solo jugamos a buenos juegos. No es así, al menos, no en mi caso: yo también juego a cosas bastante mediocres, que habitualmente no merecen una crítica porque ni siquiera los termino.

En este caso, sí que terminé de jugar a TMNT: Tortugas Ninja Jóvenes Mutantes, pero solo por dos motivos: es bastante breve (rondará las cuatro horas de juego, y exagerando), y a mi hermano pequeño, con quien lo jugaba, le entretenía. Nada más.

Y es que el lanzamiento de Ubisoft basado en la película homónima que se estrenó el mismo año es bastante mediocre. Cierto es que nunca he sido muy fan de las Tortugas Ninja, pero no porque no me gusten, sino porque nunca me he parado a darles una oportunidad. Así que es normal que no me sienta nada involucrado por esta historia en la que vemos a los héroes separados y en su peor momento, y que no me hagan mucha gracia unas bromas bastante simples e infantiles.

Eso podría ser problema mío. Lo que no se perdona ya es la incapacidad del juego para meterte en la historia que, básicamente, va de cómo nuestras tortugas empiezan a toparse con monstruos y bichos raros en la ciudad (porque ellas, obviamente, son muy normales), y tienen que reforzar sus lazos de hermandad y todas esas moñadas para descubrir qué está pasando.

La historia carece por completo de todo interés, porque no sabe cómo narrarla. Los niveles en sí no dan ni un solo dato que nos ayude a entrar en la historia, y todo se basa en dos cinemáticas (contadas y literalmente hablando) imagino tomadas de la película, y en las sucesiones entre un nivel y otro narradas en formato cómic. Algo que no basta para que el jugador se sienta inmerso en lo que le están contando. A eso se añade que la historia es tópica como ella sola y…

Los diálogos. Reitero que no me hace mucha gracia este humor simple, facilón e infantil, aunque dado que nunca he visto la serie original (no desde que era un enano, al menos), pues no sé si es particularidad del juego o es tradicional en estos bichos verdes. No entraré por ahí, por tanto. Lo que no es perdonable es que la narración esté deslavazada, que nada suene creíble y que el enemigo principal del juego diga en cierto momento “¡no me falles, caray!” a una de sus lugartenientes, porque es sencillamente patético.

El doblaje no ayuda, claro. Las voces no son malas per se, pero están dirigidas para que resulten tan insufribles e irritantes como sea posible. Las actuaciones dejan bastante que desear, y si a ello se une una traducción que no es gran cosa, mal vamos. Por si fuera poco, el montaje de sonido es malísimo (no hablo ya de lo repetitivo del sonido ambiente, que tampoco hay mucho), y la mitad de las veces unos diálogos se superponen a otros, resultando ininteligibles. Para colmo, los gráficos tampoco son gran cosa.

Todo ello sería perdonable, más o menos, si la jugabilidad fuera sobresaliente, pero esta apenas se queda en mediocre. Todos los niveles se construyen en base al mismo patrón: la tortuga avanza haciendo parkour por niveles casi siempre de tejados de ciudad y edificios (y ocasionalmente por cuevas o alcantarillas), escalando paredes, colgándose de barras y llegando a espacios abiertos donde los malos atacan a puñados. Y ya, eso repetido una y otra vez durante 16 niveles.

Por otra parte, el juego es insultantemente fácil. Básicamente, no hay forma de perder, ni de morir. Si caes al vacío reapareces en el último punto de control. Si te matan en una pelea, otro de tus hermanos te reanima. Llega eso a tal punto que a veces es más cómodo y rápido suicidarte para reaparecer que intentar salir de un lugar donde hayas caído.

Los enemigos finales están bien. No son de 10, pero están bien.

Hay aspectos buenos, es cierto. El último nivel, por ejemplo, sin ser en absoluto difícil sí que propone alguna trampa o sección más intricada, y nos obliga a luchar uno detrás de otro contra los cuatro enemigos finales del juego, aderezándolo además con una cinemática y, en general, haciéndolo mínimamente entretenido. Lo mismo sucede con el Nightwatcher, que supone un soplo de aire fresco a la mecánica del resto de niveles (no difiere mucho, pero sí lo suficiente para ser interesante).

Además, el modo “cooperativo” resulta interesante. Y no se me entienda mal: es cooperativo con las otras tortugas, pero el juego en sí solo tiene modo multijugador. Lo que sucede es que a mediados del juego, cuando los hermanos se reconcilian, puedes intercambiarte con ellos a lo largo de los niveles, o usarlos para hacer ataques cooperativos. Es algo que mola bastante, sobre todo unido al hecho de que cada tortuga tiene un poder u habilidad concretas que serán necesarias para atravesar algunos puntos del juego.

El modo "cooperativo" te permite, básicamente, hacer lo mismo
que haces sin él, pero de forma diferente.

Más allá de ello, no ofrece más. Cuando consigues la puntuación máxima en los niveles se desbloquea el modo desafío, que es básicamente el mismo parkour pero por niveles construidos en formas geométricas, cerradas y transparentes. También puedes repetir los mismos niveles de la historia para encontrar nuevas monedas, que te permiten desbloquear absurdidades como armas de juguete o tortugas cabezonas con las que jugar.

En general, el juego fracasa al desaprovecharse mucho y dirigirse de forma clara a un público demasiado infantil, algo estúpido, siendo su PEGI +12. Ubisoft perdió el norte y fue incapaz de realizar un juego que entretuviera a todos por igual, a pesar del público a que estuviera dirigido… pero claro, esto no es Rayman.

Mediocre. Puede aprobar porque su brevedad hace que no resulte demasiado pesado (aun así, lo es), y porque algunos puntos interesantes le dan un pase. Pero no es gran cosa.

Allez-y, mes ami!

Buenos días, y buena suerte.

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LO MEJOR: los movimientos y la lucha con el resto de tortugas. El último nivel está bastante bien. Es muy intuitivo. El Nightwatcher.

LO PEOR: es extremadamente fácil, simple y repetitivo, a pesar de su brevedad. El doblaje y la traducción son bastante mediocres, y ni siquiera en la narrativa o en la historia destaca. El apartado gráfico es muy mejorable. Los personajes son insufribles.

NOTA: 55/100. Mediocre. Ofrece muy poco para lo que podía ser. Entretiene un rato, pero no más (y para colmo entretiene al final, cuando empiezas a estar harto del juego).