Ratchet & Clank 2: Totalmente a tope (PS2, 2003)

Versión analizada: PS2
Otras versiones: PS3, PS Vita (versiones HD)

Ya que hace no mucho analicé el primero de los muchos Ratchet & Clank que han salido en las plataformas de Sony, he decidido seguir revisionando mi infancia, que esta pareja hizo algo más amena. Y hoy lo hago con Ratchet & Clank 2, que apareció apenas un año después del original y al que mejoró en todos y cada uno de los aspectos.

Más grande, más épico, MUCHO más difícil y con una variedad que se acrecenta, tengo que decir, no obstante, que no supone un gran salto de calidad con respecto a la primera entrega, algo que sí lograría la tercera. Hay novedades que se agradecen, aún más planetas y muchísimas más armas y artilugios, pero no acaba de rayar la perfección. ¿Por qué?

La historia, al igual que ocurriese en el primer Ratchet & Clank, es bastante desechable y de poca importancia cuando te metes en faena y empiezas a matar todo lo que se mueva. Cierto es que hay una trama, unos buenos y unos malos, pero una vez empiezas a disparar... todo da un poco igual. Aunque aquí, ni mucho menos, voy a desmerecerla, así que se os cuenta por encima (aviso, se vienen SPOILERS): nuestros dos héroes se están tomando unas merecidas vacaciones tras acabar con el presidente Drek y salvar la galaxia, pero la vuelta a la monotonía y a la cotidianidad empieza a desesperarles. Necesitan matar, moverse y reventar cosas, pero parece que todo marcha demasiado bien como para que alguien les llame. Hasta que el director de una compañía de productos de una galaxia desconocida les ruega su ayuda para recuperar un experimento secreto robado de un laboratorio de pruebas. A partir de ahí... la locura. Vamos a lo que vamos, que es lo que nos interesa.

Ahora los enemigos son más fuertes, implacables, resistentes y rápidos... pero nosotros también.

El sistema de juego no ha sufrido cambios con respecto al original (y ni falta que hacía). Sigue siendo cómodo, sencillo y de fácil adaptación, lo que unido al mayor número de armas nos lo pone más fácil para arrasar con todo a nuestro paso. Clank ya se ha quedado con sus "mejoras" de forma permanente (si habéis jugado al primero lo entenderéis), y Ratchet conserva algunos de los artilugios que usaba, como el balanceador o las deslizabotas, que ahora dan bastante más juego.

La variedad de situaciones, por su parte, sigue en un punto álgido, lo que unido a algunas novedades mejora exponencialmente la experiencia. Ahora las carreras de naves son mucho más rápidas, salvajes y épicas, las batallas espaciales tienen muchas más posibilidades (como poder mejorar las prestaciones de la nave), hay muchos y más peligrosos jefes finales y aparecen las divertidísimas arenas de combate, donde podemos luchar a cambio de ganar ingentes cantidades de dinero hasta que nos cansemos. 

Las fases con Clank vuelven a ser contadas, pero también han mejorado sobremanera. Cada vez que lo manejemos en su modo gigante, nos enfrentaremos a implacables jefes finales en espectaculares combates.

Pero lo más importante ahora son las armas. Su número ahora es, incluso, desorbitado, ya que puedes usar las del original si tienes una partida guardada en tu Memory Card. Eso, unido a todas las nuevas (casi 20 en total), nos deja muchas opciones a la hora de combatir. Las nuevas armas, además, son mucho más efectivas, cómodas de usar y espectaculares, como el Lancer, la Miniatómica (ojo a los efectos aquí de la amiga) o la Bobina de plasma. 

Y la gran novedad de todo esto: podemos mejorar las armas con un uso prolongado. Cada vez que usamos un arma y matamos enemigos, va creciendo la experiencia (cual juego de rol al uso) y cuando se alcanza el punto, nuestro cachivache evoluciona en un modelo mucho más destructivo y dañino. Hay más de 15 armas que mejorar y, en el caso de algunas, el precio es bastante desorbitado, así que más vale tener paciencia... 

El desarrollo continúa siendo bastante lineal en cada fase, aunque gracias a la trepidante acción y a la rapidez del ritmo de juego, acaba siendo un mal menor.

El vil asesinato de formas de vida extraterrestre también mejora nuestra salud, incrementándose nuestra barra de vida a lo largo del juego. El ritmo, por otra parte, ahora es más rápido, gracias a los golpes más certeros y veloces de nuestra fiel Omnillave (que también se mejora a lo largo de la aventura) y a la agilidad a la hora de cambiar de arma y disparar, con toda la espectacularidad que ello conlleva. Y también se añade el plus de mejorar nuestro blindaje, algo con lo que no contábamos hasta ahora y que se volverá imprescindible durante el juego, en progresiva y cabrónida dificultad.

En cuanto a las plataformas (se supone que el juego se engloba en ese género, así que debe ser algo importante, ¿no?), las encontramos cada vez menos presentes, siendo sustituidas por la acción a saco siempre que se puede. Cierto es que hay fases donde los saltos y los puzzles son imprescindibles, pero en conjunto, representan bastante menos que el mero hecho de apretar el gatillo.  

Los artilugios, por su parte, presentan interesantes mejoras que conllevan a nuevas y peligrosas situaciones gracias al Planeador (que nos permite movernos de un punto a otro atravesando zonas donde esquivar es clave), la Dinamo (que crea plataformas holográficas que duran un tiempo limitado) o diversos objetos para abrir puertas con algún que otro puzzle holográfico, mejorando bastante las limitaciones en este aspecto del original.

La novedad más importante reside en la aparición de la arena de combate, donde nos enfrentamos a ordas de enemigos y sanguinarios jefes finales en escenarios cerrados. Si las superamos, recibimos jugosas recompensas.

Y a pesar de toda la mejora, mecachis, no acaba de ser redondo del todo. Los detalles de este marrón residen en cositas puntuales que a la postre acaban por no ser tan importantes, pero en este análisis deben tenerse en cuenta. Una de ellas es el apartado gráfico, cuyo salto es perceptible, pero no destacado. No hay una diferencia realmente explosiva entre el original y su secuela, y eso se nota en los mundos con más elementos en pantalla, que podrían lucir algo mejor. Lo que no desmerece en absoluto los magníficos diseños de personajes y los efectos de las armas, realmente impresionantes en esta entrega.

Otro punto lo encontramos en las novedades, que, a pesar de ser resolutivas y de mejorar la experiencia, en el fondo se quedan algo cortas. Básicamente, dotan de más opciones y de nuevas estrategias al conjunto, pero realmente habrían molado nuevos modos de juego que aportasen algo más a un único modo individual muy adictivo y divertido, pero que una vez terminado no da para más.

Bueno, miento, algo sí que da, porque entre la notable duración de la aventura (de 20 a 25 horas), desbloquear todos los extras, completar todas las misiones secundarias y comprar y mejorar todas las armas y blindajes del juego tenemos para una buena temporada. Algunos de los extras, por cierto, son realmente idas de olla en toda regla (modo en primera persona, un mataovejas espacial en homenaje a las clásicas recreativas, aspectos desbloqueables...).

Esta monada es la Miniatómica. Poca munición, total devastación, Así da gusto.

Por último, el sonido sigue siendo tan brillante como pulido. Las melodías que ambientan cada mundo han mejorado su calidad, los efectos de sonido son todavía más espectaculares (a armas más grandes, devastación auditiva más grande) y el doblaje al castellano, como en toda la saga, está muy cuidado, y saca más de una carcajada gracias al sentido del humor del que goza la historia.

De modo que, sacando conclusiones, se puede decir que Ratchet & Clank 2 es, en todas las líneas, superior a su predecesor. Aunque no puedo evitar echar de menos ciertos elementos que, ya por falta de tiempo o presupuesto, sí se vieron en la tercera entrega, lo cierto es que la experiencia de juego es aún más divertida y épica. A esto contribuyen sus contadas pero efectivas novedades, la mayor variedad de situaciones y la mejorada y rápida acción, que llevan la adrenalina a un nuevo nivel. Emocionante, largo y exigente, esta secuela es uno de los mejores plataformas de PS2. Y aún no había alcanzado su punto culminante...

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------

LO MEJOR: es más grande en todos los sentidos, y sus mejoras multiplican la diversión. Su espectacularidad, variedad y doblaje al castellano.

LO PEOR: pese a su evolución, se echa en falta algún modo de juego aparte y novedades más contundentes. Gráficamente no supone un gran salto.

NOTA: 89/100. Supera al original y a muchos plataformas de calidad de PS2. Acción y emoción a raudales en una gran aventura.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------